DEPORTE, JUEGO Y VALORES
Es evidente que, a la hora de educar, se debe tener en cuenta que el deporte es una actividad excepcionalmente dotada de valores, entre los que figuran el sentimiento de grupo, la educación de la salud, la cultura del esfuerzo o el aprender a ganar y a perder.
a pesar de todo, y como reflejo de la sociedad actual, el deporte puede contener numerosos contravalores producto de los vínculos entre la practica deportiva y los intereses económicos; la victoria como único objetivo; la idolatría hacia los vencedores; el deporte como espectáculo de masas en el que las aficiones de los distintos equipos se perciben como antagonistas o enfrentadas entre si, de modo que se excluye la relación con el contrincante; unos directivos de clubes que llegan a rebatar el protagonismo a los jugadores, etc. Todo puede justificarse, incluso la violencia, ante el objetivo final: ganar a cualquier precio. en realidad, estas nuevas practicas, aglutinadas bajo el nombre "deportes alternativos", surgen como respuestas al deporte convencional y, generalmente, contienen un elevado grado de preocupación por los valores y actitudes que el deporte puede y debe fomentar. Las normas de estos"deportes alternativos" - o juegos deportivos con valores educativos - incorporan, por tanto, valores de carácter fraternal ( participación, colectividad, cooperación, coeducacion).
Es evidente que, a la hora de educar, se debe tener en cuenta que el deporte es una actividad excepcionalmente dotada de valores, entre los que figuran el sentimiento de grupo, la educación de la salud, la cultura del esfuerzo o el aprender a ganar y a perder.
a pesar de todo, y como reflejo de la sociedad actual, el deporte puede contener numerosos contravalores producto de los vínculos entre la practica deportiva y los intereses económicos; la victoria como único objetivo; la idolatría hacia los vencedores; el deporte como espectáculo de masas en el que las aficiones de los distintos equipos se perciben como antagonistas o enfrentadas entre si, de modo que se excluye la relación con el contrincante; unos directivos de clubes que llegan a rebatar el protagonismo a los jugadores, etc. Todo puede justificarse, incluso la violencia, ante el objetivo final: ganar a cualquier precio. en realidad, estas nuevas practicas, aglutinadas bajo el nombre "deportes alternativos", surgen como respuestas al deporte convencional y, generalmente, contienen un elevado grado de preocupación por los valores y actitudes que el deporte puede y debe fomentar. Las normas de estos"deportes alternativos" - o juegos deportivos con valores educativos - incorporan, por tanto, valores de carácter fraternal ( participación, colectividad, cooperación, coeducacion).
